¿Cómo fueron sus inicios en la Ingeniería?
Duros. Vienes de Bachillerato y al llegar a la Universidad todo cambia. Aquello que te gustaba resulta volverse más complicado y tienes que gestionarlo de otra manera. Al tiempo comienzas a cogerle el ritmo de trabajo y se hace todo más llevadero; comienzas a disfrutar de lo que vas haciendo y eso es la Ingeniería.
¿Cómo definiría su crecimiento profesional hasta el día de hoy?
Constante y progresivo. Mis primeros pasos fueron unas prácticas en un gabinete de ingenieros. Luego pasé un verano en Repsol Cartagena. Ya cursando el máster estuve nueve meses en Ford Almussafes. Finalmente comencé a trabajar como Jefe de Turno, gestionando todo lo referente a la producción, trabajando en lo que realmente me apasiona.
¿Dónde se ve trabajando en 5 años?
Creo que es muy difícil planificar el futuro de esta carrera y más siendo aún joven. Supongo que me gustaría mantenerme en el mundo relacionado con la producción. El hecho de medir y mejorar cada día, liderar equipos y solventar incidencias hace que me guste ese tipo de trabajo.
¿Está desarrollando algún proyecto actualmente?
Estar en este sector conlleva involucrarse en proyectos de mejora continua, unos de mayor coste ocupacional y otros más inmediatos. En cuanto a la formación, considero que cualquier momento es bueno para ampliar conocimientos en la Ingeniería.